Ventanas de aluminio: pro y contras frente a otros materiales

El aluminio es el material más popular para hacer ventanas en casas y compite con otras opciones igualmente funcionales como el PVC o policloruro de vinilo  y la madera.

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Los expertos en carpintería en aluminio y persianas de Montajes Aluviarte detallan para ti los beneficios del uso de éste metal, para que la selección del material de tus ventanas sea la más acertada.

Un metal que ofrece ahorro energético

 

Ante la creciente toma de conciencia sobre el uso más responsable de la energía, y con la aprobación de normativas que fomentan esta utilización, un material como el aluminio se renueva con la incorporación en España, en 2006, del aluminio con Rotura de Puente Térmico o RPT. Esta modalidad, permite estar convenientemente aliado con las nuevas políticas de ahorro energético más provechosas para el planeta y el bolsillo.

 

Ventajas clave del aluminio

 

Lee más y conoce los beneficios de este material cuando se utiliza para la elaboración de ventanas.

  • El aluminio tradicional es un material económico y por esta razón, se ha hecho muy tradicional en la instalación de ventanas. Aunque el aluminio con Rotura de Puente Térmico o RPT es más costoso sus beneficios lo transforman en una buena inversión a la hora de elegir tus ventanas.
  • Cualquiera que sea su presentación, es una alternativa muy resistente a los golpes, y como los marcos suelen ser estrechos permiten la entrada de más luz natural.
  • Viene en una amplia gama de colores y como también se moldea con facilidad es posible hacer un sinfín de diseños.
  • No requiere retoques frecuentes de pintura debido a su protector del óxido.
  • Su mantenimiento y limpieza es muy sencillo así como su instalación.
  • Ofrece una seguridad extra porque es un material difícilmente inflamable, característica que se agradece en caso de un incendio en nuestro hogar

Sus debilidades como material

 

La mayor desventaja es que como metal conductor hace que los espacios pierdan temperatura en los meses de invierno, y no aíslen suficiente en verano lo que produce un mayor gasto de energía. Crece el consumo y suben las facturas por el uso de la calefacción o del aire acondicionado.

Pero el incremento en los costes de  la electricidad,  una conciencia más ecológica así como las nuevas normativas de eficiencia energética, como el Código Técnico de la Edificación (CTE), han servido para que crezca la demanda de ventanas hechas con materiales más aislantes como la madera y el PVC.

El aluminio tradicional “suda” o produce condensación en forma de  gotitas de agua que aparecen por el choque entre dos temperaturas distintas, estancias internas calientes y el clima frío del exterior.

También es un material que se puede picar con el paso de los años.

Antes de tomar una decisión, consúltanos.  Te asesoraremos sobre la opción más acertada ante tus requerimientos.